martes, 1 de agosto de 2006

Querer, ceder

En el pasado de mi vida pensé equivocadamente que querer era ceder casi sin medida para adaptarme a las peticiones, deseos, expectativas o necesidades de otro. ¡Qué error!

Ahora entiendo que querer es querer a otro, pero a mí mismo a la vez. Y por ello, nunca ir en contra de mi propia naturaleza y de lo que me sea natural, gentil a mi espíritu, no violento hacia mi ser.

Lucas

3 comentarios:

danielapaz dijo...

Qué manera!!!, yo he sido igual toda mi vida, y además hacerse cargo de los problemas de los otros, sin preocuparse de los propios... mal.
Pero llega el momento en te das cuenta que no era ese el camino, y que si no te quieres no es posible querer a los demás, y si siempre estas cediendo, y postergándote por ello, no creces y tampoco crecen los que están alrededor tuyo.
besos

danielapaz dijo...

de hecho mi última relación termino por el estancamiento que se produjo al ser ambos así...
Espero haber aprendido algo...
Gracias por las reflexiones que me ayudan a la reflexión.
Danita otra vez

Anónimo dijo...

Me estoy dando cuenta de eso mismo y me sorprendo de cómo han pasado los años sintiéndome tan egoísta porque sentía una escondida insatisfacción... y es eso, que mi naturaleza esta encerrada.
chau, gracias, un beso